El estudio de los mecanismos del envejecimiento de la piel tradicionalmente ha pasado por alto un área importante: la unión dermoepidérmica (UDE). Esta es la capa
responsable de sostener la epidermis y de la comunicación entre las células epidérmicas y dérmicas.
La DEJ es físicamente una membrana basal que separa las células de la piel en la epidermis de la matriz extracelular (MEC) que se encuentra debajo, en la dermis. Esta membrana está compuesta por dos capas, la lámina basal, en contacto con las células, y la lámina reticular subyacente, en contacto con la MEC. La lámina basal es rica en colágeno tipo IV, proteoglicanos y glicoproteínas entactina y laminina. Estas moléculas proporcionan una red estructural y propiedades bioadhesivas para la unión celular.
La laminina es una glicoproteína de unos 850 kDa y es, después del colágeno, la proteína más abundante en la MEC. Sin embargo, mientras que el Colágeno desempeña
un papel exclusivamente estructural en la piel, la Laminina interviene en la funcionalización y activación de las células, en procesos como la proliferación,
migración y adhesión celular. Estos mecanismos son necesarios para mantener el equilibrio normal de la piel y son esenciales para procesos tan importantes
como la cicatrización de heridas, por ejemplo.
La laminina sólo existe en las membranas basales. Está compuesto por tres cadenas polipeptídicas muy largas (alfa, beta y gamma) dispuestas en
forma de cruz asimétrica y unidas por enlaces disulfuro. Las tres cadenas existen como subtipos diferentes, lo que da como resultado doce isoformas diferentes
para la laminina, de las cuales la mejor estudiada es la Laminina-1.
Los queratinocitos reconocen los dominios de unión de la laminina, particularmente la laminina-5, mediante el uso de sus propios receptores de integrina, proteínas transmembrana ubicadas en puntos de unión específicos llamados hemidesmosomas.
Lipotec ha identificado y sintetizado una secuencia de la cadena alfa de la laminina: el hexapéptido-10. Este péptido conserva muchas de las características de la proteína nativa y promueve la adhesión y proliferación celular.
Ciertas características de la DEJ se ven alteradas por el proceso de envejecimiento, como la capacidad de anclaje de los queratinocitos, probablemente debido a deficiencias en la expresión de las integrinas a medida que envejecemos. También se ha demostrado que la síntesis de laminina-5 disminuye en la piel envejecida. Esto provoca una pérdida de contacto entre la dermis y la epidermis, y hace que la piel pierda elasticidad y se vuelva flácida. La cohesión entre dermis y epidermis es fundamental para mantener el equilibrio de la piel porque permite el transporte de oxígeno, nutrientes y residuos, contribuyendo a la salud de la epidermis.
Este trabajo demostrará que un hexapéptido sintético de Laminina-1 es capaz de restaurar la función normal de la piel promoviendo la síntesis de Laminina-5, estimulando la proliferación de queratinocitos y fibroblastos, induciendo un efecto redensificante de la dermis y una mejora de la elasticidad y compacidad
de la piel, tonicidad y suavidad.
Dónde puedes encontrarlo: F-LIFT+ FACE, F-EYE CONTOUR.